pink tax

La tasa rosa, también conocido como la pink tax en inglés, es una discrepancia de precios basada en el género que afecta principalmente a las mujeres. En muchas ocasiones, los productos dirigidos a mujeres cuestan más que los mismos productos destinados a hombres, lo que se traduce en un aumento en el gasto de las consumidoras. El término pink tax se originó en Estados Unidos en la década de 1990, cuando algunas investigaciones revelaron que las mujeres pagaban más por servicios como cuidado de la salud, produtos de higiene y ropa en comparación con los hombres. Esto se debe en parte a la percepción de que las mujeres están dispuestas a pagar más por productos que se consideran "femeninos" o simplemente porque los productos para mujeres son etiquetados de manera diferente y vendidos a un precio más elevado. La tasa rosa ha sido objeto de controversia y críticas, ya que se considera una forma de discriminación de género que perpetúa estereotipos y desigualdades económicas entre hombres y mujeres. Algunos países han tomado medidas para abordar esta disparidad de precios, como la implementación de leyes que prohíben la discriminación de precios basada en el género. En conclusión, la tasa rosa es un fenómeno que refleja la desigualdad de género en el mercado y pone de relieve la importancia de combatir la discriminación económica hacia las mujeres. Es necesario tomar medidas para abordar esta disparidad de precios y promover la equidad de género en todas las áreas de la sociedad.