male tears

El término "male tears" se ha popularizado en los últimos años como una forma de ridiculizar las quejas de los hombres sobre el sexismo inverso. Este concepto ha sido utilizado por las feministas para resaltar la ironía de que los hombres, que históricamente han sido los privilegiados en nuestra sociedad, se sientan agraviados cuando se habla de igualdad de género. La frase "male tears" surgió como una reacción a las quejas de algunos hombres que consideraban injusto que se les exigiera participar en la lucha por la igualdad de género. Estos hombres argumentaban que ellos también sufrían discriminación, acoso y desigualdad en diversos ámbitos, como en el salario o en la custodia de los hijos. Sin embargo, las feministas han señalado que el sexismo inverso no es comparable al sexismo que han enfrentado las mujeres a lo largo de la historia. Las desigualdades en el ámbito laboral, la objetificación de los cuerpos de las mujeres o la violencia de género son solo algunas de las formas en las que las mujeres han sido oprimidas por el patriarcado. Por lo tanto, la expresión "male tears" se ha convertido en una forma de burla hacia aquellos hombres que se sienten incomprendidos o agraviados por la lucha feminista. Es una forma de recordarles que su privilegio de género les otorga una posición de poder que muchas mujeres no tienen. En definitiva, el término "male tears" es una manera de desmontar el discurso de victimización de algunos hombres y de recordarles que la lucha por la igualdad de género es una lucha de todos y todas. La igualdad no se logrará sin la participación activa de los hombres en la eliminación de las estructuras patriarcales que perpetúan la desigualdad de género.